El canguro salvador
LAS AVENTURAS DE UN PILLIYO PRESENTA: "El canguro salvador"
Un día eres mamá de un regordete querubín de escasos 5 kg. que con su abrir y cerrar de ojos resuena en tu corazón una especie de tintineo mágico, algo así como un "pling, pling", que con tu visión de madrecita mexicana juras que el universo entero resuena al unísono. Y al otro...
Llenita de ilusión y expectativas falsas, mandas a bañar al crío, el cual comienza a cantar un patético son de Tatiana que dice: ¨... y así cochino me voy a quedar", ( ) Tratas de alcanzarlo para que siga tus instrucciones en vano, pues no sólo no obedece; brincotea y te torea sobre la cama atacado de risa, con un intenso dejo aromático con suaves notas agrias... Así, nuevamente sientes que el universo que antes resonaba al unísono con su dulce abrir y cerrar de ojos, ahora conspira con las fuerzas de la naturaleza para hacer "cocktelito" bacteriano en el cuerpo lleno de tierra, agua y sal de tu antes dulce y celeste querubín. Any Way, si gozas de cierto cinismo y tienes sentido del humor negro (como el mío), haces alarde del caos y te da por escribir...
Con risa disimulada, continúas con la agenda disciplinaria y adviertes: -Anda Miguel, métete a bañar, ¡ya está el agua! -¡Jiote, jiote mamáaaa! Vamosh a hacer un trato, primero veo Sara y Pato ( y de paso se hace ídem) y luego me baño. -Que no Miguel, ya está la regadera a temperatura ambiente (obvio no, pero hay que darle realismo dramático al asunto). Métete ya, o le hablo a Jose. Jose es la terapeuta del curso de Pascua, de Caballuz Centro Ecuestre de Desarrollo Integral pero descubrí que con tan sólo mencionar su nombre Pilliyo salió como cuete atropellado a meterse a la regadera. -¡Vaya! pensé. Y relamiéndome los bigotes saboreaba la hazaña. Mmmm de haber sabido, esto es fantabuloso! Síii, al parecer esta será la estrategia de la semana, mencionar a Jose para que el Pilliyo del terror se me cuadre. ¡Bien Angelica Perez Valle, bien! Y echando la cabeza para atrás regodeándome en el breve triunfo como el Señor Burns me carcajeaba mientras sobaba mis manitas como villano en blanco y negro con música de piano de fondo, imaginando todas las cosas que le iba a pedir a Pilliyo hacer y que el otro como niño teto con peinado de raya en medio y corbata de moño obedecería sin chistar, muajajajajajaaa.
En eso oigo a Miguel, llamándome para que lo sacara de la regadera, hazaña que también es como trámite burocrático porque empiezan los ruegos y las cantaletas tipo: -anda Miguel, pisa el tapete, anda ven mijito que hace frío, mijito por Dios déjate poner crema........... Pero llenita de ilusión y estrategia pensé implementar el "Jose-mode", pero perdí de vista que el pedazo de Pilliyo se pasó la misma película que yo, pero al revés. En ésta , él sería el villanito con capa sombrero y bigotes y yo la niña teta asustada que bailaría a su ritmo con todo y coletas llenas de caireles, desde luego también en blanco y negro, porque en cuanto me asomé para sacarlo del baño empezó a cantar: -"El canguro salvó su caca, el canguro salvó su caca, el canguro salvó su caca y luego se hizo pipí" Con los ojos como de yoyo y los oídos como bocina seguí contemplando la escena ya que el rítmico Pilliyo salió de la regadera con una jicarita sostenida entre las piernas mientras caminaba y bailaba. Nada más le faltaron las mangas de maraquero, (porque hasta eso que tenía ritmo y toda la cosa). La verdad sólo pude atacarme (que no cagarme de risa por aquello de que el canguro la fuera a rescatar) y dejé (de momento) la estrategia "Jose Mode". Para empezar a bailar el nuevo sencillo de Pilliyo Récords titulado: "El Canguro salvó su caca".
Yo ya ni sé para qué hago planes si este me los desbarranca con una %&*# canción.